El Diario de Marta la Rara

El Diario de Marta la Rara
Ana Bermejo

martes, 24 de julio de 2012

Ya tengo escamas.... y aletas


Y están a puntito de salirme las branquias. Llevo tantas horas metida en la piscina que se me ha quedado el body,  flácido cual acelga pocha. Claro que tanto nadar y nadar me estoy poniendo cachas, porque una, lo reconozco, es más bien birriosa, pero no todo van a ser virtudes y más  virtudes. ¿Virtudes...? Tú lo que eres es una optimista empedernida. Y tú, un envidioso de la merde. No quien habla no es mi otro yo, es el lerdo de mi hermano, que está a punto de hacerme una aguadilla. Joé y mira que odio yo las aguadillas. Pues el muy memo dedica media mañana a revolotear junto a mi cual tiburón. ¡Hola Martita... Que voy! me amenaza con un toniquete grillil. Y yo patitiesa. Eso sí, yo no le quito ojo, pero en un cuanto me despisto mirando al socorrista, un tipo color chocolate de lo más macizo, el muy Mambru bucea bajo mis piernas, tira de una de mis patillas y servidora cae hasta el fondo de la piscina como si  fuese un lastre. Narices, claro que pido auxilio y así, con la bocota bien abierta, lanzando gritos desgarradores me hundo. Y a a tragar y tragar agua y más agua. Jopelines, pero si el otro día el presidente de la comunidad de vecinos le dijo a Ignacio I el grande, vamos mi padre, que este año le iban a pasar una factura extra  por despifarro de agua, porque ya me había bebido media piscina. Os cuento esto para que sepáis esas del clan que andais perdidas por esos mundos de Dios, que aquí servidora, sigue al pie del cañón defendiendo el Clan de Súper Marta y Cia. Sí, aunque sea sola. Sí aunque sea en la piscina. Que desde el agua también se puede estar ojo avizor.
Marta acuática.

jueves, 12 de julio de 2012

Li lacio cual acelga y el inspector Requejo de farra

¡No te mola! Llevo aquí esperando la intemerata la llamada de Requejo, pero el poli anda missing. Así que harta de estar tiesa cual estaca he llamado a la comisaría y me han largado que el inspe está de vacaciones. Así con todo el morro. Y como  Li ya estaba verde cual limón y lacio cual acelga,y  servidora  estaba hasta los mismísimos de bajarle comida, de bajarle agua, de llevarle  a hacer pis y de escuchar sus miles de quejas: Malta que no sel yo, Malta que yo sel buen chico, Malta que mi no sel mafioso. Malta, polfa... ha soltado así sin más al Niño del Rollito de Primavela y le ha mandado a enlosar la Gran Muralla y que se entienda la poli con él. Eso sí, me ha prometido que el 1 de septiembre, a las 9 de la mañana,  estará como un clavo en la puerta de mi casa para largar a lo grande del caso de El Dragón de Jade. Joé, que una también quiere irse de vacaciones. Así que con las mismas me voy a zambullir en la piscina y me voy a quedar allí hasta que las ranas críen pelo o aún mejor, hasta que me convierta en sirena.  Siempre, claro, que la mía mamma, Ignacio I el Grande, mi abu,  el bobolindo de Nacho o la perra-cerda de Baby no opinen lo contrario.
Ah, pero no sonrías pedazo de caco, facineroso, mastuerzo, so malandrín, que el clan de Súper Marta sigue ojo avizor y no te vas a ir de rositas. Que aquí el que la hace la paga. Te lo juro por la cruci.

Súper Marta acuática